
Aunque la idea de este blog es contar lo que pasa dentro del concello, contar lo que desde mi puesto de concejala puedo hacer por mejorar mi ciudad, hoy siento la necesidad de compartir algún que otro sentimiento.
Estamos viviendo días muy difíciles, con situaciones complicadas y que auguran situaciones extremas para muchos vecinos. Y en medio de esta cuarentena nos coincide el Día del Padre. El mío, Jesús, Chuchiño, falta desde el 9 de junio de 2011…digo que falta pero me refiero en el sentido físico, los que sufrís la ausencia de seres queridos sabéis que nunca se van, están siempre con nosotros. Hoy me acuerdo mucho e él, de su vitalidad, de su cachondeo, de sus ganas de vivir (algo heredé yo en ese sentido) y me acuerdo también de mi abuela Narcisa, de como se iba en paz hace poco más de dos años, agarrada de mi mano hasta el último suspiro y me emociono, y pienso en el desasosiego que en estos momentos estén pasando todos aquellos que están perdiendo a familiares y no se pueden despedir de ellos, ni siquiera pueden abrazarse los que se quedan. Durísima situación la que nos toca vivir, aislados, confinados para evitar que se colapse la sanidad.
Mi sentido de la responsabilidad me lleva a veces a enfadarme con alguno que otro, porque me cuesta entender que haya gente que no acabe de entender la gravedad de la situación, o aún entendiéndola crea que se pueda saltar a la torera las medidas que la mayoría intentamos seguir a rajatabla.
Y aunque nos cueste, también hay que ser responsables en este Día del Padre diferente. Desde la semana pasada que empezamos con las medidas especiales vemos en las redes todo tipo de sentimientos, dudas, además del maravilloso ingenio que tenemos en este país, pero hoy no es un día del padre cualquiera, hoy estamos lejos de ellos, no podemos verlos, abrazarlos. Desde estas líneas doy unas gracias emocionadas a aquellos padres que hoy, que estos días, están dándolo todo para ayudarnos, para cuidarnos, para protegernos.
GRACIAS
Un gesto especial para los que están en primera línea trabajando, que no compensa las ausencias, pero es lo mínimo que podemos hacer, agradecer y aplaudir…y ayudarles con nuestra responsabilidad.
#quedateencasa #yomequedoencasa